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El 4 de septiembre de 2006, el experto en vida salvaje australiano, Steve Irwin, también conocido como "El Cazador de Cocodrilos",[1] fue atacado fatalmente por una raya mientras filmaba un documental titulado Ocean's Deadliest en la Gran Barrera de Coral. El ataque, así como las secuelas y, presumiblemente, el momento real de la muerte fueron capturados por la cámara, debido a una regla de producción impuesta por Irwin de que los camarógrafos no deberían dejar de grabar si algo empeoraba, ya que eran estos momentos de peligro genuino que dieron ventaja a los documentales de Irwin.
Sucesión de los hechos
Según los testimonios de testigos presenciales, miembros de la tripulación, la raya golpeó a Irwin en el pecho varias veces, perforando su corazón, después de lo cual sus colegas lo sacaron inmediatamente del agua hacia Croc One (nombre del yate de la producción).[2] Había pasado una hora antes de llegar a tierra, tiempo durante el cual el colega de Irwin (y el hombre que estaba detrás de la cámara cuando Irwin fue atacado), Justin Lyons, le practicó RCP, mientras un segundo camarógrafo continuaba filmando imágenes. Irwin fue declarado muerto por los paramédicos segundos después de su llegada. Según Lyons, sus palabras finales fueron "Me estoy muriendo".
El vídeo de la muerte de Steve Irwin es el único ataque de raya que a sido grabado en la historia. Las imágenes resultantes fueron entregadas a las autoridades de Queensland, quienes se dice que eventualmente lo devolvieron a la familia de Irwin, quienes, a su vez, dicen que lo destruyeron. Cuando se le preguntó acerca de sus sentimientos sobre la posibilidad de que el video fuera transmitido algún día, Lyon dijo que espera que nunca se publique por respeto a la familia de Irwin, y también reveló que ya no está en posesión de las grabaciones y que sospecha que no hay copias restantes en existencia.
Supuestas capturas
En los años posteriores a la muerte de Irwin, un puñado de presuntas piezas de material de archivo (en forma de videos y capturas de pantalla) han aparecido en línea, aunque su validez nunca ha sido probada y generalmente se acepta que han sido sacadas de concepto.
Hace años surgieron en Internet una serie de tres imágenes que supuestamente fueron sacadas del vídeo original del ataque. Se desconoce si son verdaderas o falsas, nunca se pudo confirmar.[3]